El viernes 16 culminó la primera semana de Maniquíes abyectos, muestra organizada por Ver o no ver con la participación del blog La cinefilia no es patriota, durante la cual ha habido una sostenida asistencia. Ese día causó mucha expectativa Tokyo Decadence de Ryu Murakami, obra de perversa maestría, radiografía implacable de la cultura sexual japonesa que juega con lo fetichista y lo sadomasoquista, a través de diferentes roles y prácticas que prostitutas y clientes asumen ceremonial y estoicamente. Es un filme perturbador al que seguramente volveremos más adelante.

Hoy lunes 19, siempre a las 6 p.m. en el Auditorio de Humanidades de la Universidad Católica, se inicia la segunda semana de proyecciones. Toca el turno de Sombre (1999), la película del francés Philippe Grandrieux, cuyo tráiler se puede ver aquí.