Han pasado casi diez años del estreno de uno de los más extravagantes filmes que lanzara Hollywood en el fin de siglo. El club de la pelea, trasladó el universo de Chuck Palahniuk hacia la pantalla grande, con todos sus alardes, revoltoso anarquismo, y sus golpes y efectos. Pues entre varios detalles del film podemos destacar su acertada irreverencia, una muestra inédita de ella podemos verla en la siguiente secuencia. Se trata de un breve momento sentimental en el cual el narrador y protagonista (Edward Norton), y su alter ego, el irrefrenable Tyler Durden (Brad Pitt); dejan por un momento sus afanes extremistas y se entregan a una versión tranquila pero maliciosa de la clásica «Venus» de Frank Avalon rebautizada como «Penis». No hace falta abundar más sobe el tema, solo oírlos. A pesar de lo irrisorio como que al final no cuadraba en medio de los sonidos violentos de Dust Brothers o la extraña e hipnótica Where is My Mind? de Pixies.

(Vía Cinematical)