(o el amor por el cine B)

Si te emocionas cuando subes a una combi y hace correteo, esta es tu película.
Si eres de los que madruga los domingos para ver la Fórmula 1, tienes que verla.
Si eres fan de Tarantino, seguro ya la viste, pero la tienes que ver en 35mm.

Se ha estrenado Death Proof en Perú, coincidentemente a días del estreno de sus Basterds en Cannes. Si bien «A prueba de muerte» no era una película como para ganar Cannes 2007, sí es una que entretiene sobremanera, tanto a los que buscan cine para pasar el rato, como a los más serios que buscan estilo, ritmo y valores cinematográficos.

Tarantino hace una cinta de amor al cine. Si Fellini nos dejó 8 1/2; Angelopoulos reflexionó con La mirada de Ulyses; Truffaut nos emocionó con La noche americana; a Tarantino le sale Death Proof. Una cinta para celebrar el cine B, ese cine de mujeres voluptuosas y carros rápidos, de poca lógica, mucha acción, y no por eso falta de ideas. Cintas populares, muchas veces miradas sobre el hombro por el gran canon del cine de autor, pero con muchos atractivos. Era un cine para el gran público. En Perú, Death Proof no se ha estrenado en las salas A-B, sino en las más masivas. No hay mejor piropo para esta película.

No vamos analizar la cinta, sino a celebrarla regresando a una escena. Personalmente, la que más me gusta es la conversación de Zoe y sus amigas en el café, conversa cinéfila tal, llena de referencias a ese cine B que Mister Q quiere hacer homenaje. Es la excusa para este recuento de citas, entre persecuciones en carros, surfers y niñas rosas. Éstas son las cintas de esa secuencia:

Vanishing Point de Richard C. Sarafian (1971)

La razón por la que Zoe y Co. van por el Dodge Challenger se llama Kowalski, el protagonista de Vanishing Point. Un ex policía que hace la apuesta de llevar el auto de Colorado a San Francisco en menos de 15 horas. Rompiendo todos los límites de velocidad, no es díficil tener detrás a la policía. Si el tráiler ya da vértigo, imagínense toda la película. ¡Hay que buscar, ya! Dos datos extras, el remake se hizo en 1997 con Viggo Mortensen al volante. El guión original viene firmado por Guillermo Cain, el seudónimo de Guillermo Cabrera Infante.

Dirty Mary Crazy Larry de John Hough (1974)

Una Bonnie y Clyde de los 70s, más o menos. Peter Fonda es Crazy Larry, un aspirante a las carreras NASCAR, que en apuros de dinero asalta un supermercado; en la fuga se le une Dirty Mary, su «choque y fuga» (pun intended) del fin de semana. El resto es persecuciones, autos volando y chocando, un sheriff en helicóptero, más velocidad, y un final inesperado. El tráiler como muestra:

Gone in 60 Seconds de H.B. Halicki (1974)

«The real one, no the Angelina Jolie bullshit» como dicen en Death Proof. Una cinta con estadísticas: robar 48 autos en dos días, o chocar 93 autos en 34 minutos -en la persecución de autos más larga del cine-, puedes ver esta película por cualquiera de los dos ángulos. Dirigida, producida y protagonizada por Halicki, es una serie B de verdad y de culto. El remake, ya lo saben, es con la Jolie y Nicolas Cage, y es bullshit. El tráiler es de la versión remasterizada del original:

Big Wenesday de John Milius (1978)

Esta no tiene que ver con autos, sino con surf. Es la historia de tres amigos en los 60s, y su llegada a la madurez en medio de la cultura del surf y sus fiestas, atravezando por la experiencia de Vietnam. Quien menciona la cinta es Zoe, viniendo de Auckland, Nueva Zelanda, no es de extrañar que la declare un clásico -como lo es para todo surfista que se precie-. Protagoniza Jan-Michael Vincent, el de la serie Airwolf. Lo que más impresiona son las olas, miren:

Pretty in Pink de Howard Deutch (1986)

La mencionan como la clásica cinta adolescente de los 80s, y es eso. Tribulaciones adolescentes, new age y amores imposibles. Cambian las apariencias pero los formatos son parecidos, ahora sufre Hanna Montana. Producida y escrita por John Hughes, quien después del éxito de The Breakfast Club, hizo películas de ese corte en serie. Si acaso tiene interés aparecen nombres como Harry Dean Stanton, James Spader y Gina Gershon en el reparto. No la vean, el tráiler, no la escuchen, el soundtrack.

Ahora sí, vuelvan a ver Death Proof, sabiendo de qué hablan las chicas en la mesa.