Magaly Solier acaba de dar a conocer su próxima película, una comedia italiana que lleva como nombre provisional Alfonsina y el mar –sin aparente relación con la famosa canción argentina–, y que marca el retorno al cine, en el rol principal, de Lucía Bosè.

La actriz italiana es una figura legendaria que trabajó con algunos de los mejores autores europeos del siglo pasado, Antonioni, Buñuel, Bardem, Fellini, Cocteau, Chávarri, Duras; y que desde la década del 80 empezó a espaciar su filmografía. Además, Lucía es madre de Miguel Bosé, el amante bandido.

La cinta narra la historia de una veterana actriz europea que, después de muchos años, regresa a los lugares donde transcurrió su infancia para cumplir un viejo sueño: crear un modesto canal de televisión en un pequeño pueblo donde nunca se ha conocido la pantalla chica. Así, la premisa se inscribe, a primera vista, en una antigua tradición del cine italiano, la comedia contrastante y popular.

El proyecto, que está a punto de rodarse, entre setiembre y octubre, en el norte de Chile, en Iquique y utilizando como locación el pueblo minero abandonado de Humberstone, es dirigido por David Sordella, autor de dos largos: Fratelli di sangue (2006), que participó en el mercado del Festival de Venecia, y «Corazones de mujer» (2008), cinta filmada en Marruecos, que integró la Berlinale en la sección ‘Panorama’.

Sordella conoce desde los años 90 el continente americano, con una serie de videoclips, spots publicitarios, y cortos realizados en Estados Unidos, Nicaragua y Bolivia, e incluso uno de ellos, Yawar (1996), aparece como una producción peruano–boliviana.

Con esta nueva película, Solier alarga su filmografía internacional de producciones europeas en nuestro continente: la belga–estadounidense «Altiplano» en Perú, la española «Blackthorn» en Bolivia, y ahora esta producción italiana en Chile, cuyo estreno está previsto para la primera mitad del 2012.