Lo visto y lo bailado: Carrie, The Conjuring, The Hunger Games, Thor, Captain Phillips y más


Qué horrorEl terror –u horror– por mucho tiempo ha sido mi género menos favorito. La idea de pasarlo mal (y no solo en el cine) nunca me ha atraído mucho. Pero notar lo exitoso y atractivo que son este tipo de cintas no puede no llamar la atención. ¿Qué le ven, qué tiene, qué hace que a sus fanáticos les guste tanto? Pero para poder criticar, hay que experimentar al menos. Es cosa de elegir de una oferta que tiende a ser amplia, con permanentes dos o tres títulos en cartelera.

El mes pasado estuvo The Purge (James DeMonaco, 2013), un slasher futurista, donde en una sociedad muy próxima en el año 2025, sin delincuencia, y sin aparentes problemas socioeconómicos, existe un feriado anual donde hay permiso para todo: matar, violar o cualquier crimen que quieras. Atacas o te escondes. Buen storyline, pero sabemos que una buena premisa no hace verano, y la novedad rápidamente se pierde en una confusa oscuridad, repetitiva y que aburre.

Similar disgusto sucede en You’re next (Adam Wingard, 2011), donde también un grupo de jóvenes asesinos, camuflados en máscara de animales, ataca a una millonaria familia en su casa de campo. El problema en ambas es que no importan nada los personajes. Entonces, no importa mucho si los matan o se salvan. Es apenas un conteo regresivo, con unos twists irrisorios.

The Conjuring – James Wan

El remake de Carrie (Kimberly Peirce, 2013), a su vez, algo intenta. Carrie original es un hito en la historia del terror y, nos guste o no, todo el mundo cinéfilo la conoce. La versión actualizada, si bien tiene elementos que funcionan, son producto de la historia original más que de la propuesta de la nueva versión. Y las novedades que proponen son su peor enemigo. La Carrie actual pareciera disfrutar su poder asesino, y lejano a lo que Sissy Spacek lograba con su cara horrorizada al captar sus macabras acciones, aquí se pierde en una Chloë Grace Moretz que goza asesinar a sus compañeritos. Mucho efecto especial y poca tensión, no hay misterio ni contención.

Carrie Chloë Grace Moretz

Ahora, El conjuro (James Wan, 2013) funciona impresionantemente. Porque se toma su tiempo, presenta a los protagonistas y los enfrenta a un poder malvado, realmente amenazante, peligroso y bigger than life. Será recordada, tal como las pelis de terror que se recuerdan, por sus personajes.

The Hunger Games: Catching Fire
Digamos que hay dos tipos de personas en el mundo: a) los que han leído la novela y b) los que no. Todos los del primer grupo, lógicamente irán a ver las películas. Pero no sé si hay muchos del segundo grupo que vayan al cine a ver estas entregas. Soy uno de ellos. Y si bien puedo reconocer y captar que THG: Catching Fire (Francis Lawrence, 2013) es bastante mejor que la primera, aún siento que no se entiende, se pierde y se dilata entre tanto vestido feo y sobre actuaciones. Su propuesta distópica puede ser atractiva pero las decisiones de arte, y casi todo el vestuario, es demasiado irreal para mi paciencia. Aunque pareciera que cumple muy bien para sus fans. El grupo de treceañeras que también estaba en la sala de cine, alucinó con esta secuela. Chillaban de gusto por el protagonista underdog–panadero, y por el otro chico que es el que en realidad le gusta a la heroína. El público objetivo natural es mujeres bajo los 25 años. Yo, que no tengo ni lo uno ni lo otro, no logro conectar para nada con esta película.

Thor: Dark World
La sensación que la oferta cinematográfica de los multiplex empeora no es nueva, pero me parece que la actual está peor que nunca. Pero también siento que siempre se tiende a sentir que «estamos peor que nunca» en estas lides. Quizás suceden las dos cosas. Hay tan pocas películas que nos interesan en el cine, ahora se ven en otros lugares. Veo la lista de nominados del Spirit Awards y concluyo rápidamente que las que más (me) dan ganas de ver, no estarán en ninguna sala de cine. Ni modo.

Pero en una reciente tarde de lunes esta idea quedó más que demostrada. Estaba yo en una multisala, teniendo que hacer hora «adentro de las salas». La única opción era entrar a la sala de al lado. Thor 2 (Alan Taylor, James Gunn, 2013), doblada en español. Veo un minuto, y una orgía de rayos me expulsa rápidamente. Entro a la segunda sala, y aunque ahora con subtítulos, otra vez Thor 2. En la tercera sala proyectaban You’re next, que recientemente ya había visto. Me doy cuenta que en la sala más grande empezará una función en pocos minutos. Me siento, espero, veo los trailers. Empieza la función y es, doblada al español, Thor 2. Mejor me meto a ver Gravity un ratito. Aunque sea en la sala 3D y yo sin lentes, Sandra Bullock ladrando gana por años luz.

Captain Phillips y About Time
Esta historia que han tildado de épica, o también como el gran regreso de Tom Hanks, no funciona. Y no porque esté mal hecha, porque si bien su progresión avanza, su problema es estructural. El «conflicto» es entre dos fuerzas: por un lado está, literalmente y con todas sus fichas, la US Navy. Y los enemigos son cuatro somalíes en una pequeña lancha. Captain Phillips (Paul Greengrass, 2013) molesta y no me funciona porque son como los tíos lateros, uno puede volver 45 minutos después y adivinará exactamente en qué momento de la historia va. No sorprende, y aunque eso no consiste en un deal breaker, no tiene amenaza real o conflicto. En términos narrativos es inofensiva y siempre pisa tierra firme. Ojalá sus camarógrafos hubiesen tomado la misma decisión.

Captain Phillips Paul Greengrass

About Time (Richard Curtis, 2013) funciona medianamente por su premisa genial, un chico descubre que los hombres de su familia tienen la capacidad de viajar a su pasado, pudiendo a modo de prueba y error lograr todos sus objetivos y deseos. Pero el riesgo de tener un súper poder es que se acaban tus problemas, lo que debilita peligrosamente cualquier narración. Si este romance deja satisfechas a sus espectadores es más bien por la manipulación, de «pónle musiquita y cámara lenta que esta escena así les encanta».

Así, el noviembre cinematográfico en salas chilenas estuvo menos que regular. Pienso en alguna que destaque y no la encuentro. A ver qué sucede en el fin de año. Al menos quedan buenas opciones fuera de las salas. Por lo menos, lo visto y lo bailado…

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4 respuestas

  1. […] en la que sus personajes se puedan desenvolver (algo que se puede ver claramente en filmes como El Conjuro, de James Wan), y lamentablemente abusa de los saltos repentinos acompañados por sonidos de […]

  2. […] que sufre en silencio y familiares que descubren el acoso cuando ya es demasiado tarde. Incluso remakes como el de “Carrie” (Kimberly Peirce, 2013) se adaptan a estos tiempos, usando la cámara de un celular y YouTube como […]

  3. […] El conjuro. Lo bacán de tener cineastas como James Wan es que han logrado revitalizar un género como el […]

  4. […] en un clásico del cine, aun sigue sin lograr tener una mejor versión que la original. Lo nuevo de esta cinta recibe criticas rudas en la narración, la cantidad de elementos que tiene a su […]

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