Demonic: Nada nuevo dentro de «La casa del demonio»


Si hay alguien que mueve la pesada máquina del cine de terror hollywoodense es el joven director James Wan (Malasia, 1977). Desde que una pequeña película con bajo presupuesto pero sumamente divertida lo pusiera en el mapa del cine, me refiero a Saw (2004), Wan ha sabido crearse un lugar y ser considerado como una de las nuevas promesas del cine de terror.

demonic-horror-movie1

Sus trabajos posteriores demuestran su solidez como director, destacando “Insidious” (2010) y sobre todo, «The Conjuring» (2013). Esta vez se encarga de producir Demonic (2015), segundo largometraje del director Will Canon y protagonizada por Maria Bello y Frank Grillo. Y solo se me viene una frase al terminar de verla: más de lo mismo.

En “Demonic”, el detective Mark Lewis (Grillo) tiene a cargo resolver una serie de asesinatos cometidos en una casa abandonada. Cuenta con la ayuda de una psicóloga, Elizabeth Klein (Bello, a quien por ratos confundí con Elisabeth Shue) para entrevistar al único sobreviviente (y sospechoso) de la masacre, quien tuvo la genial idea de entrar en aquella casa junto con otros jóvenes e incautos amigos para investigar posibles fenómenos paranormales. No hay que ser adivino o haber visto muchas películas sobre apariciones para saber que están a punto de despertar a alguien que no dudará en desatar su furia sobre ellos.

Demonic recoge todo aquello que hemos visto una y otra vez, atreviéndose a ir al más allá pero sin atreverse a dar un paso más allá… cinematográficamente hablando. Una casa poseída por espíritus malignos tras una muerte violenta (se me viene a la mente “The Amityville Horror”), contacto con fuerzas desconocidas a través de juegos como la ouija (¿es necesario que ponga ejemplos posteriores a “El Exorcista”?).

demonic

Somos testigos de cómo unos jóvenes imprudentes y ansiosos de fama registran sus propias agonías, cámara en mano, con confesión final y el “I wanna go home!” incluido (muy a lo “The Blair Witch Project”). No hace nada más que demostrar la decadencia del cine paranormal tras tanta actividad, por así decirlo. La película se hunde en la predictibilidad, uno o dos paneos con sobresalto incluido, seres desconocidos arrastrando a los protagonistas de un lado a otro de las habitaciones, luces que se prenden y se apagan, puertas que se abren y se cierran sin razón. Y ante la pregunta más obvia sobre una película de terror, mi respuesta sobre esta cinta es: no, no da nada de miedo.

Demonic, aparte de ser bastante aburrida, no hace más que demostrar el desgaste de este subgénero, pese a chispazos no del todo efectivos pero con un enfoque novedoso (como I Am a Ghost). Me queda claro que al menos en cuanto a cine de terror paranormal se refiere tendré que seguir mirando hacia el Oriente, en búsqueda de propuestas originales.

Archivado en:


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *