Bill Murray, protagonista de Perdidos en Tokio, bien pudo haber estado filmando una segunda parte titulada Perdidos en Estocolmo, al ser detenido por la policía sueca por conducir presuntamente borracho un carrito de golf por las vías de la ciudad. El suceso fue confirmado un portavoz de la policía en declaraciones al diario Expressen.

La detención se realizó en la madrugada del miércoles, cuando Murray, de 56 años, recorría el centro de la ciudad en un vehículo habitual de los campos de golf. Al negarse a pasar el dosaje etílico, fue conducido a la comisaría más cercana, donde se le realizó un análisis de sangre, cuyo resultado aún se desconoce. También se está estudiando si es legal conducir un carro de golf en medio del tráfico normal de una ciudad.

El protagonista de Flores rotas y Vida acuática es un fanático acérrimo del golf desde su juventud, cuando trabajó como caddy para financiar sus estudios. Según el diario sueco, Murray asistió al Masters de Golf de Escandinavia en Suecia y estuvo celebrando con amigos locales y astros del deporte, donde se habría pasado de copas. ¿Santory Times?

(Vía La Nación)