Desde el Bafici que el nombre de la película me sonaba, pero nunca pude verla en el festival, ni en su proyección en el MALBA (Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires), ni en la proyección de hace unas semanas en un pequeño cine club de mi barrio San Telmo. Esta vez no me hubiera perdonado no aprovechar la oportunidad de ver Filmatrón, había algo en ella que me mataba de ganas de verla sin siquiera haber visto el tráiler. Bueno, ayer la ví en el Buenos Aires Rojo Sangre y les puedo decir que es la película argentina que más disfruté ver desde que llegué a estas tierras.

Si España tiene a Alex de la Iglesia (Acción Mutante, El día de las bestias), México a Guillermo del Toro (El laberinto del fauno, Hellboy, El espinazo del diablo) y Chile a Nicolás López (Promedio rojo, Santos), Pablo Parés y Farsa Producciones serían los representantes argentinos de esta generación hispana de cine hecho por geeks amantes de los cómics, los superhéroes, lo fantástico, los mutantes y zombies, del gore, etc. En 1990, cuando tenían apenas 12 años, Pablo Parés y Hernán Sáez fundaron Farsa Producciones, empresa que aún se mantiene vigente estando ellos apunto de cumplir treinta. La productora pasó de ser un juego fantasioso de niños a ser definida el 2005 por el Diario Clarín como «la comunidad creativa que desafía al Nuevo Cine Argentino.» Entre sus produciones tienen filmes de culto como Plaga zombie: Zona mutante, comedia gore, o Nunca asistas a este tipo de fiestas, graciosísima parodia de terror ochentero.

Con Filmatrón, Parés cuenta una autobiografía fantástica respecto a la historia de Farsa Producciones. Adaptando libremente la novela 1984 de George Orwell, Filmatrón nos sitúa en un futuro cercano donde un estado totalitario impone su ideología por medio del control y de un único canal televisivo. Contra ello se rebelan un grupo de jóvenes rechazados, proponiéndose filmar una película de ciencia ficción clandestinamente poniendo en riesgo su vida solo por el objetivo de mostrarle a la gente que existen cosas distintas a las impuestas por el gobierno. Está película es un simpático y alentador elogio al cine independiente, Parés no afloja en ningún momento por la parte técnica ni estética, que son de lo mejor del filme tomando en cuenta sus límites económicos. Junto a estos efectos especiales y estética cómic, complementa la originalidad y el gran sentido del humor de Farsa Producciones para dar como resultado a la película más reconocida del cine fantástico argentino de los últimos años.

Filmatrón viene de un exitoso circuito por los festivales, especialmente por lograr entrar en al Selección Oficial del Bafici. Y es que cuando recién se empezó el proyecto hace 5 años, todas las puertas se le cerraban a la película, incluso las del Bafici, por ser una película de género. Pero no solo logró entrar en una de las secciones más importantes del festival (Competencia nacional), sino que logró el premio que más querían ganar: el Premio del Público. Luego partió al Festival de Tandil donde también resultó triunfante, ganó el premio a mejor actriz y una mención especial del jurado por mejor película. Ahora en el BARS 2007 fue proyectada en el segmento «Novedades», en realidad no sé porqué no está en competencia internacional, pero amenaza con hacerse cargo nuevamente del premio del público.

No se sabe si habrá alguna otra proyección de la película como lo dice el fotolog del filme, ni tampoco si llegará a los circuitos comerciales, aunque estoy seguro que sería todo un éxito. Solo queda esperar ansiosos al siguiente trabajo de Farsa Producciones: Nunca más asistas a este tipo de fiestas, secuela del filme con prácticamente el mismo nombre. Farsa es un sello de calidad creativa y técnica, vería cualquier cosa que venga con su firma. Les deseo la mejor de las suertes a esta pequeña gran productora y ojalá se extienda con producciones alrededor del resto de Latinoamérica, donde sufrimos del mismo problema de homogeneidad cinematográfica. Pueden ver los primeros trabajos de la productora en el canal personal de YouTube de Pablo Parés, de acá saqué un clip de casi 8 minutos del work in progress de Filmatrón que se hizo hace 3 años.