El arte de los créditos iniciales: de Saul Bass a Garreth Smith

Los créditos, tanto iniciales como finales, muchas veces tienen personalidad propia dentro de un filme. No todos son ‘integrados’ (cumplen con las menciones solamente) sino que algunos son una producción aparte. Muchas veces esta tarea está encargada a un profesional diferente del editor como videoartistas, diseñadores gráficos o animadores que aportan su mirada particular de la película por medio de su talento, agregándola al acabado final.

Estos artistas pueden ser anónimos para el público en general, pero son muy solicitados en la industria por la calidad y eficacia de sus trabajos. Las películas buscan cautivar de entrada, entonces este recurso cobra mayor validez en pos de ese cometido.

Aquí algunos de los nombres y trabajos de estos autores del diseño y la presentación que muchos cinéfilos reconocemos por su obra, mas no por su firma. A considerarlos, entonces.

0. El más representativo antecedente al posterior revuelo de este oficio es el majestoso inicio de Show Boat (1936), de James Whale. Musical histórico, considerado como uno de los más importantes en la historia del cine, #2, por AFI (American Film Institute).

Comencemos por el prolífico, y hasta famoso:

1. Saul Bass fue un diseñador gráfico estadounidense de los más requeridos en los 50 y 60, décadas en las que trabajó con ilustres cineastas como Otto Preminger, Billy Wilder, Carol Reed, William Wyler, Alfred Hitchcock, etc., siempre al lado de su esposa Elaine, su mano derecha. Martin Scorsese, con quien también trabajó en varias oportunidades (Goodfellas, Cabo de miedo, La edad de la inocencia y Casino) reflexionó sobre su trabajo, calificándolo como el de un gigante del diseño. Un referente indispensable en este apartado.

Aquí dos ejemplos de su talento.

Vértigo (1958), de Alfred Hitchcock

It’s a Mad Mad Mad Mad World (1963), de Stanley Kramer

2. Maurice Binder, el «chico Bond» que estuvo a cargo de los créditos de 14 filmes de la franquicia, siendo esta su primera participación y License to kill (1989) su última.

Dr. No (1962), de Terence Young

3. El currículo de Kyle Cooper apunta trabajos en Flubber, La Momia, Zoolander, Spiderman 1 y 2, Superman Returns, El increíble Hulk, Una guerra de película, entre otros. Este fue su primer trabajo sobresaliente.

Se7en (1995), de David Fincher

4. La pareja francesa Olivier Kuntzel / Florence Deygas interactúa desde finales de los 80. Ellos desarrollan su arte en el video y la animación, aunque no siempre al servicio de Hollywood. Este es uno de sus excelsos trabajos de lucro.

Catch Me If You Can’t (2002), de Steven Spielberg

5. Dos de Garret Smith en colaboración con Jason Reitman, con quien también trabajó en Amor sin escalas. Vaya que todos estos trabajos aportan algo simpático a las películas que integran.

Thank You For Smoking (2005)

Juno (2007)

The Art of the Title Sequence es una web dedicada a estos asuntos. Créditos de ayer y ahora que pueden revisarse en sus post, que incluyen también material informativo de algunas curiosidades relativas al tema.