Los europeos siguen definiendo sus candidatos para ocupar alguno de los privilegiados cinco cupos destinados a la categoría de mejor película en lengua extranjera. Suecia apuesta este año por lo más conservador (como casi todos). Se trata de Everlasting Moments, la más reciente realización del experimentado Jan Troell. Este director se convirtió a principios de los 70 en uno de los abanderados de la apertura del nuevo cine sueco a las posibilidades del género. La proyección a nivel internacional de aquella cinematografía, había sido hasta ese entonces solo el personalísimo universo de Ingmar Bergman. Los emigrantes, realizada en 1971 y su continuación La nueva tierra realizada un año después se convirtieron en éxitos mundiales. Todo en ellas tenía la vocación épica y narrativa que distinguió a su país durante la era muda. Con estas películas protagonizadas por estrellas como Max von Sydow y Liv Ullmann, Troell alcanzó la cima de una carrera de gran proyección peroque tuvo que enfrentar la crisis creativa de los siguientes años.

Su nueva película nos presenta la historia de la primera fotográfa en Suecia, Maria Larsson (Maria Larssons eviga ögonblick es el título origninal). Su vida con un matrimonio prematuro y atroz, y su posterior refugio en el mundo en le oficio de capturar las imágenes con la cámara son los motivos centrales. Todo será expuesto al puro y serio estilo que se necesita para ser considerado un candidato ideal para las premiaciones. Aún falta bastante para que se den a conocer a los finalista que acudirán a la noche de gala en California. Pero parece que para algunos no es muy temprano para comenzar con la campaña. Troell y su nueva película participaron recientemente en el festival de Toronto. De acuerdo a la respuesta del público, es muy probable que el metraje vaya a ser reducido. Ojalá tengamos la oportunidad de comprobar si esto la beneficia.

(Vía Variety)