Hay momentos en que tenemos que apartar la mirada de la pantalla -de la PC, de la tele, de la sala de cine-, porque hay situaciones que lo ameritan, y llaman a solidarizarnos con quienes están sufriendo. Tal fue el caso el 2007 tras el terremoto de Pisco; tal es el caso ahora con la campaña que se emprende por las víctimas del frío en el sur del Perú. Este es un post para sumar fuerzas, pantallas y espacios para que se tomen las previsiones y se atiendan a todos los afectados.

Poco podemos agregar a lo dicho ya en otros blogs, o en el post-manifesto de Martín Aquiles. Tan solo invocar a dejar de lado nuestra típica y fría indiferencia; y dar alguna muestra de solidaridad y lucha contra el frío, exigiendo la pronta reacción de las autoridades responsables, o enviando directamente una ayuda concreta a la zona afectada.

En Dersu Uzala, la cinta rusa de Kurosawa, sus dos protagonistas caminan por la estepa helada, y quedan perdidos en la inmensidad, a poco del anochecer y su frío mortal. Dersu, un campesino hermitaño de la estepa, logra salvar al Capitán Arseniev, un oficial del ejército, gracias a su conocimientos tradicional. La película completa está en YouTube; y las escenas que referimos, en el siguiente fragmento:

La escena continua aquí. Ojalá como Dersu, esta acción conjunta puede ayudar a salvar a más de uno en Puno.

• Especial de El Comercio: Una gélida y mortal indiferencia.
• Heduardo es realista.
• Perú.21, Marco Sifuentes: Frío, todavía