«Sangra. Grita. Late!»: Entrevista con Andrea Luna, Iván Chávez y Manuel Calderón


“Sangra. Grita. Late!”, el tercer largometraje de Aldo Miyashiro Ribeiro (Lima, 1976) viene de presentarse en Estados Unidos, donde se estrenó dentro de la sección oficial del Festival de Cine de Austin, a fines de octubre pasado. Iván Chávez, uno de los diez actores que forman parte de la película, fue testigo de ello, y se trajo de regreso a Perú la maleta cargada de buenos comentarios y mucho optimismo de cara a su estreno en las salas comerciales de Lima, este próximo 12 de abril.

Hemos conversado con él y con dos de sus colegas de reparto, Andrea Luna y Manuel Calderón, para ir conociendo un poco más de esta película, una propuesta fragmentaria y laberíntica que propone 3 historias entrecruzadas para retar al espectador, donde cada actor debe asumir tres personajes distintos en cada episodio. Miyashiro se aleja así de las fórmulas comerciales en su regreso a los cines, con la que parece ser la propuesta más personal y arriesgada en lo que va de su carrera como cineasta.

¿Nos podrían contar cómo manejaron tener que interpretar tres personajes diferentes en la misma película?
Iván: Sí, todos los actores del elenco hacemos un personaje diferente en las tres historias que hay dentro de la película, y en algunas tenemos más participación y en otras acompañamos al resto del elenco. Por ejemplo, en la primera historia yo soy el director de un colegio que tiene que tomar una decisión difícil sobre un profesor amigo suyo, que no viene haciendo bien las cosas. En la segunda historia, que es una comedia disparatada, soy el amigo de barrio de unas chicas que al final necesitan una ayuda porque se han metido en una situación problemática. En la tercera historia también tengo una participación pequeña, soy un entrenador de box cubano. Todos son personajes totalmente diferentes, para un actor es increíble poder hacer esto, en cine sobre todo.

Andrea Luna e Iván Chávez (Foto: Javier Gagrera)

Andrea: En mi caso, tuve unos ensayos previos con Aldo, pero aparte de eso trabajé en mi casa, porque cada semana de rodaje hice un personaje diferente. También tuve la ayuda de Haysen Perkovich, como director de actores. Tanto él como Aldo me ayudaron, fueron muy detallistas y muy claros en lo que querían. Además, es mi primera película y recién he entendido mejor el código de actuación, yo vengo de hacer televisión y teatro, que son totalmente diferentes al cine.

Manuel: Para el Perú, creo que esta película es sui generis en el tratamiento actoral. Para nosotros los actores ha sido un reto bien chévere tener que cambiar de personaje para cada historia.

Las tres historias son independientes, pero ¿ustedes sienten que haya algo que las una? ¿Cuál es el tema o hilo conductor entre las tres historias?
Andrea: A mí me parece que es la desgracia…

Manuel: El nexo que tienen las tres historias es Aldo [risas]. Hablando en serio, sí creo que hay un hilo conductor que une toda la película, y tiene que ver con el dolor, con la compulsión, con la ansiedad de tener que vivir en una ciudad como Lima. La presencia de la ciudad es muy importante en la película, y muestra cómo se manejan y cómo ocurren las cosas acá. La película nos implica a todos porque compartimos el contexto urbano y social en el que suceden sus historias.

Iván: A mucha gente le toca una historia más que la otra. Puedes pasar del drama a la comedia absurda y de ahí pasas a la tragedia. Las escenas están mezcladas en la edición final, de manera intercalada. Quizá el espectador a partir del minuto 15 de la película recién se da de cuenta que son tres historias distintas, al principio se juega con esa confusión. Sin embargo, se ha hecho un tratamiento particular de imagen y color en cada historia, eso ayuda a poder diferenciarlas.
Pero regresando a tu pregunta, yo también creo que lo que une todas las historias es la ciudad, la película tiene un carácter muy citadino. La película puede ocurrir en Lima, pero también en cualquier ciudad de Latinoamérica. El tema del bullying es universal, el tema de las drogas y el narcotráfico, y el tema del sistema médico que colapsa. Son temas que son conocidos y si los unes podrías sentir que esa es tu ciudad.

¿Cómo fue la experiencia de trabajo con Aldo como director?
Andrea: Aldo te transmite mucha paz, mucha tranquilidad y seguridad, creo que eso es lo que se necesita para tomar el mando de un proyecto tan grande.

Iván: Aldo comenzó siendo un dramaturgo, es director de teatro de muchas obras, entonces tiene mucha experiencia dirigiendo actores. Mucha gente lo conoce por series y películas comerciales, de acción, pero en realidad esta es una película muy personal, hay mucho de su esencia en “Sangra. Grita. Late!”. A nivel personal, Aldo me da mucha libertad para crear, él sabe dónde ponerme un límite y ver lo que funciona. La creación del personaje fue conjunta. Hay mucha tranquilidad cuando se trabaja con Aldo.

Manuel: Yo a Aldo lo conozco del teatro, cuando actúe para una obra suya que dirigió Jimena Arroyo. Para esta película, Aldo me dio la posibilidad de jugar con tres niveles de expresión, cambiando permanentemente de registro, y eso me ha parecido fantástico. Para mí ha sido una experiencia muy rica, un reto muy divertido. Disfrutaba tanto que no quería se terminasen las jornadas de rodaje, yo quería seguir jugando con mis personajes.

La película se presentó en octubre pasado en el festival de Austin, en Estados Unidos. Iván, tú estuviste allá, ¿puedes contarnos un poco de esa experiencia?
La verdad es que fue el primer festival internacional al que asisto. Lo primero es que el festival es increíble, hay muchísimos guionistas de talla mundial, es un evento que está lleno de talleres, de seminarios, y proyectan muchas películas de distintas partes del mundo. Nuestra película inicialmente no tenía ninguna llegada al festival, fue que se presentó y solita fue avanzando, y llegamos a estar entre las 8 finalistas del festival, en una fuerte competencia internacional.

Sangra. Grita. Late! fue la única película latina, la única hablada en español. El público, mayoritariamente estadounidense, se nos acercaba, nos saludaba, nos decían quiero conocer al director, quiero conocer a los actores, ¿en Perú hacen películas así?, etc. Entonces todo eso nos abrió la mente a muchas cosas, ¿no? Que se pueden hacer cosas buenas, con un presupuesto modesto. Me dio mucho gusto el recibimiento allá, y esperamos que aquí sea lo mismo.

Manuel Calderon e Iván Chávez. (Foto: Javier Gragera)

¿Qué expectativas tienen ahora con el estreno comercial?
Andrea: Ufff, yo estoy súper nerviosa [risas]. Porque recién ahorita me he visto en el tráiler, en pantalla grande, antes lo había visto solo en una computadora. Y es otra sensación, de hecho, me ha emocionado mucho, me ha conmovido.

Iván: Yo estoy muy sorprendido porque conozco a todos los actores, y sus carreras y trayectorias, pero cuando vi la película, el nivel actoral era increíble, sostenían la película. Yo veía al público conmoverse, llorar, todos estaban metidos en la historia. Es una película de autor, y esperamos que el público peruano sienta esa misma emoción que nosotros hemos sentido.

En uno de los reviews que aparece en el tráiler se menciona como referencia a Tarantino. ¿Fue un comentario que se recogió en el festival?
Iván: Sí, todos esos comentarios son del festival, de guionistas, de directores de la industria de allá. Porque puede pasar que la película se proyecte y nada más, pero que haya un interés real, es distinto. Se sentía que algo está pasando en Perú, hay un nuevo cine. Mucha gente nos decía que de Perú o de Latinoamérica conocían solo películas costumbristas, que es el cine que llega a los festivales, ¿no? En cambio, esta es una película totalmente urbana.

En el proceso de creación de los personajes, ¿Aldo les dio algunas referencias, películas u otras obras?
Andrea: Para una de las historias, Aldo me recomendó que vea una película con Penélope Cruz, sobre un chico que pierde el rostro…
Javier: Esa película se llama «Abre los ojos».
Andrea: Sí, tuve como referencia esa película para hacer el personaje de la chica que requiere el trasplante de corazón. A Aldo le gustaba mucho la dulzura que tenía el personaje de Penélope Cruz.

Iván: En mi caso, para la segunda historia vi algunas historias que mostraban una naturalidad total ante un hecho que puede ser totalmente absurdo. Lo que te pide la comedia negra es darle mayor importancia a la misma situación, no tanto a la actuación.

Andrea: Y para la historia con la prostituta, que me costaba mucho hacer, tuve que ver una película con Woody Allen….
Laslo: «Mighty Aphrodite».
Iván: Sí, con Mira Sorvino.
Andrea: Esa fue mi referencia.

Manuel: En mi caso, Aldo y yo no usamos referentes claros. A mí me gusta trabajar a partir de imágenes que creo en mi cabeza, es un ejercicio que siempre hago. Más que acciones físicas, me gusta imaginarme un gesto o una postura de mi personaje, y eso me sirve para empezar a jugar. También me ayudaron un montón Kareen [Spano] y Érika [Villalobos], que son actrices que tienen más experiencia que yo con la cámara. Y luego lo que más hace falta es confiar en ti. Eso es esencial para un actor. Si no confías en ti, se levanta un muro y estás frito.

Por último, ¿nos podrían contar sobre sus próximos proyectos?
Manuel: Seguiré trabajando en la pedagogía de actuación, con los talleres que dicto en la AAA (Asociación de Artistas Aficionados) y además vamos a reponer la obra “Esperando a Godot” en el Centro Cultural Ricardo Palma, en Miraflores, donde actúo con Jimena Arroyo. Por otro lado, también me gustaría retomar la dirección, y tengo algunos proyectos en los que ya estoy trabajando.

Andrea: Yo tengo todo este año dedicado al teatro. Tengo propuestas para cine, pero aún no se han concretado porque se están viendo temas de financiamiento, eso siempre es difícil. En abril, estreno una obra en el teatro Ricardo Blume bajo la dirección de Mateo Chiarella junto con Roberto Moll, se llama «Música». Luego estaré en «Misterio», en Teatro La Plaza.

Iván: Ahora estoy en televisión en la serie «Cumbia Pop», esperando si es que hay una segunda temporada. Es que a veces en televisión te piden no hacer teatro…
Andrea: O en el caso de América TV, a veces tienes que grabar en sus estudios en Pachacamac, y eso te limita… Este año no tengo tele, hace dos semanas terminé de grabar «Colorina», así que por ahora estoy descansando de la tele, totalmente metida en mi nuevo personaje que estoy haciendo para el teatro.

Entrevista realizada por Laslo Rojas y Javier Gragera, de EnLima.pe, el 1 de marzo del 2018, en San Borja.

Manuel Calderón en «Sangra. Grita. Late!»

3 respuestas

  1. […] Sangra. Grita. Late!, de Aldo Miyashiro. El tercer largometraje de este director se presentó el año pasado en el Austin Film Festival. Se estrenó comercialmente el 16 de agosto. […]

  2. […] Sangra. Grita. Late!, de Aldo Miyashiro. El tercer largometraje de este director se presentó el año pasado en el Austin Film Festival. Se estrenó comercialmente el 16 de agosto. […]

  3. […] Sangra. Grita. Late!, de Aldo Miyashiro Vientos del sur, de Franco […]

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *