Al ritmo de The Rollings Stones y con la siempre dinámica cámara de Scorsese comenzó hoy el 58º Festival de Berlín con la proyección, en la gala inaugural de Shine a Light, el documental de Marty sobre los inagotables astros del rock. Jagger y compañía se han sentido más que complacidos con la recepción en la capital alemana. ‘Es un honor para nosotros estar aquí. Es la primera vez que un documental musical abre un festival así. Nuestro agradecimiento al director, Dieter Kosslick’, saludó Jagger a su arribo en la alfombra roja del festival.

Después de la proyección del documental-concierto de poco más de dos horas, se realizó una rueda de prensa, en la que no hubo incidentes que reportar. Los Stones se portaron a la altura de las circunstancias, y Scorsese se dedicó a responder las inquietudes de la prensa. ‘Tratamos de estar lo más cerca posible de un concierto sin llegar a ser un incordio’, manifestó, por ejemplo.

Hoy, también, se dio inicio a la retrospectiva del maestro Luis Buñuel con la proyección de Le journal d’une femme de chambre. Pero si, acaso, algo ha opacado el inicio de la fiesta cinéfila en Berlín, es la ausencia (y retiro) de dos de los jurados del festival. La realizadora danesa Susanne Bier no pudo evadir compromisos pendientes en el desarrollo de su nuevo proyecto fílmico, y la actriz francesa Sandrine Bonnaire esgrimió motivos estrictamente familiares. El jurado termina conformado por sólo seis personas: el realizador Costa Gavras que lo preside, las actrices Diane Kruger y Shi Qui, el notable editor y sonidista Walter Murch, el diseñador de producción Uli Hanisch y el productor Alexandre Rodnyansky.

Veremos cómo se las arreglan en los días que vienen cuando se proyecten las cintas en competencia. Para mañana se esperan: la filandesa Musta Jää (Black Ice), la china Zuo You (In Love We Trust) y la aclamada There Will Be Blood.