Decir que David Lynch tiene predilección por los fetiches no es nada nuevo, basta revisar algunas de sus películas para conocer las fuertes obsesiones femeninas del director de Terciopelo Azul. Pero, que el propio Lynch nos brinde una versión de ellas, a través de una muestra fotográfica es diferente. De eso se trata justamente la exposición que bajo el nombre de FETISH acaba de finalizar -iba hasta el tres de noviembre- en la Galerie du Passage en París.

El proyecto nació a partir de un trueque creativo, el diseñador de zapatos francés Christian Louboutin creaba unos especiales para la exposición de Lynch The Air is on Fire en la Fundación Cartier -una revisión completa de la obra artística del director-, y a cambio, Lynch, a requerimiento de Louboutin, fotografiaba un grupo de zapatos de diseño exclusivo.

Louboutin sobre el proyecto escribe:

Muchos ven los zapatos como un accesorio para caminar. Sin embargo, hay zapatos para correr, otros para nadar… y también hay zapatos para tener sexo. Si hay un elementos de fetichismo en el guardaropa, es el zapato femenino. Ellos tienen el aire de un totem.
Es un objeto de culto que llama al ritual. He diseñado estos zapatos-esculturas, no tanto para ser usados como para exaltar lo que tienen de más bellos: la unión del tobillo con el pie.

El resultado, claro, es inquietante. Las fotos vienen a continuación: