La revista Caras en su decimotercera edición -en cuya portada aparece Patricia Pereyra, actriz del aún no estrenado filme El acuarelista– difunde un reportaje sobre la industria cinematográfica en el Perú, enfocándolo desde el punto de vista de tres relevantes figuras del ambiente cinematográfico: Rafael Dasso, gerente general de Cineplanet, Ricardo Bedoya, crítico de cine, y Rosa María Oliart, presidenta del Consejo Nacional de Cinematografía (Conacine).

En el artículo de Diana Kisner, el representante de Cineplanet habla de las cifras de ingresos e inversión de los últimos tres años y de la expansión de los multicines en provincias y en los conos limeños: «La gente de estratos más bajos valora muchísimo sus locales de cine y están dispuestos a pagar si se les da un buen estándar.

Por su parte, Bedoya nos alcanza un análisis de las consecuencias de esta apertura de mercado sobre todo en el tema de piratería, el incremento de espectadores, el fomento de la cultura cinematográfica y la concentración del mercado en unas cuantas películas. «Cualquier aumento en el número de salas es bueno porque supone un mayor dinamismo en general. Es decir, hay más espectadores; sin embargo, este fenómeno refuerza la estrategia internacional que refuerza la hegemonía norteamericana».

Finalmente, Oliart se enfoca en el trabajo del Conacine, la problemática de distribución así como la falta de apoyo del público y del Estado hacia este cine, a partir del cual «la imagen del país podría ser distinta en las pantallas del mundo».

Gracias: Diana Kisner y revista Caras