Hace algunos meses me encontraba revisando una larga colección de DVDs cuando, de pronto, me topé con una película llamada Cosas que nunca te dije. Cautivado por el nombre, procedí a colocar el disco lejos de los otros cientos de títulos que distraían mi atención. Lo único que quería era estar frente a mi televisor y poder ver la película. Recordé, en ese momento, que había vivido una experiencia similar hace algunos años cuando, arrastrado por el nombre, corrí a una sala de cine para ver Mi vida sin mí, de Isabel Coixet. Decidí, entonces, buscar el nombre del director del DVD que tenía entre manos: dirigido por Isabel Coixet, sentenciaban los créditos. Fue entonces cuando entendí que Coixet es una directora que tiene algo que la mayoría de realizadores, inclusive algunos de los más notables, no tienen: títulos especiales.
Un tiempo después, caminando por nuestra hermosa «filmoteca» local, encontré La vida secreta de las palabras, confirmé todo lo anteriormente dicho y procedí a colocar a Coixet no solo en mi lista de directores favoritos, sino también en la de personajes agradables.
Ann es vendedora en una tienda de fotos. Su novio la deja y, muy deprimida, intenta suicidarse. En estas circunstancias aparecerá un tal Don, que se dedica a vender casas y de noche atiende, como voluntario, el teléfono de la esperanza. Ann, tras salir del hospital, telefonea al número que le dio su psiquiatra. Don está al otro lado de la linea.
Pueden leer una reseña escrita por Fabricio Rebatta, en el Blog del Cinematógrafo, y no se olviden que tienen una cita con un gran momento hoy jueves 15, a las 10:00 a.m., en Europa Europa (canal 75 de Cable Mágico). La repiten el domingo 25 a la 1:15 p.m.
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