El público de Lima de inicios de este siglo, incluso el más cinéfilo, no conocía de la existencia de un cine hecho en provincias. Por ello a inicios del 2004 fue una sorpresa enterarse del estreno de una película trabajada íntegramente en Puno. ¿Quién había dado el paso? Se trataba de Flaviano Quispe Chaiña que con El huerfanito rompía el canon habitual de películas peruanas hechas sólo por realizadores limeños o afincados en la capital. El éxito de público que acompañó a esta película retribuyó con creces el esfuerzo de Flaviano y su gente y abrió un camino que ahora se ve más prometedor gracias al premio que acaba de obtener «Sobrevivir en los andes», el nuevo proyecto del director juliaqueño.

Para saber cómo comenzó todo y cuáles son las motivaciones de Flaviano conversamos con él en dos entrevistas realizadas el año 2006.