El asesinato del camarógrafo argentino Leonardo Henrichsen, excepcionalmente registrado para la posteridad por él mismo, es una de las más famosas imágenes de la violencia política en el Chile de los años setenta. No sucedió durante la dictadura de Augusto Pinochet, quien capturó el poder a sangre y fuego el 11 de setiembre de 1973, pero sí fue una especie de antesala de esa orgía de tortura y crimen que duró diecisiete años. Ocurrió el 29 de junio de 1973, el día del «tancazo», la asonada militar contra el gobierno del presidente Salvador Allende que sirvió de ensayo para el posterior golpe de Estado. Henrichsen registraba cómo los uniformados creaban el caos en las calles de Santiago, disparando y amenazando a la población, cuando se sintieron observados por su lente y empezaron a tomarlo como objetivo, hasta que la bala lanzada por el cabo Héctor Hernán Bustamante Gómez lo alcanzó y mató casi de inmediato, quedando todo grabado. Milagrosamente, las escenas sobrevivieron al hecho y dieron la vuelta al mundo. Recién en el año 2005, el asesino fue plenamente identificado, pero falleció en 2007 sin pagar por su delito.

En el documental Aunque me cueste la vida, los directores argentinos Pablo Espejo y Silvia Maturana han abordado la trayectoria de Henrichsen, que en ese momento trabajaba para la televisión sueca, y reconstruido el trágico episodio, teniendo como base Reportaje con la muerte, la biografía escrita por el venezolano Modesto Emilio Guerrero. Consiguieron los testimonios del médico que lo atendió, y del abogado que asumió el juicio a los militares que dispararon, y provocaron la fuga de Bustamante cuando quisieron conversar con él. La cinta de poco más de 80 minutos, que ganó el Tercer Festival de Cine Social y Derechos Humanos – Cine Otro, en la categoría de Memoria Histórica, se estrenó en Chile el pasado lunes 6 en la Cineteca Nacional de ese país, y seguirá proyectándose los jueves, viernes y sábados hasta el 25 de abril.

A propósito, no es la primera cinta que trata este acontecimiento. El año pasado, el también realizador argentino Andrés Habegger estrenó Imagen final, documental de 91 minutos que recuerda a Henrichsen y a la vez destaca el descubrimiento de la identidad de Bustamante. Vean el inicio de Aunque me cueste la vida:

(Vía La Tercera)